Las tendencias para este 2024 debieran estar centradas en una mayor incorporación de automatización, digitalización e incorporación de IA en diversos procesos, tanto operativos como administrativos; un ejemplo de esto sería un mayor uso de BIM, no solo para proyectos de construcción, sino también para la gestión de recursos en otras industrias, como la acuícola, donde la nueva normativa convierte en requisito la trazabilidad de los distintos componentes estructurales de los centros de cultivo, por lo que este tipo de herramientas informáticas se presenta como una buena alternativa, de un producto existente en el mercado, que se ajusta a estos requerimientos.
Esta creciente presencia de la tecnología en los procesos de negocio, exige una mayor capacitación de las personas, así como llevará a la redefinición de varios modelos de negocio. Nuevos factores clave de éxito se deberán incorporar al momento de definir los planes de desarrollo estratégico, entre los que se puede encontrar la incorporación de capacidad de procesamiento de mayores volúmenes de datos para dar respuesta rápida a las variaciones en el entorno.
Por otro lado, podemos ver cambios en los requerimientos del medio respecto de los factores con los que se mide el nivel de sostenibilidad y responsabilidad social de las empresas; hay mayor interés de la comunidad respecto de cómo se gestionan los factores ambientales, sociales y de gobierno corporativo dentro de las organizaciones (en mayor o menor medida dependiendo de la industria, siendo la de la construcción una donde hay bastante interés), donde la diversidad, inclusión, transparencia y ética empresarial han adquirido mayor relevancia.
En esta misma línea, este mayor uso de herramientas tecnológicas abre oportunidades, como el uso de la realidad aumentada para potenciar procesos de formación de personas, por ejemplo, en el uso de maquinaria o en la familiarización con infraestructura específica, algo que ya se ha implementado con éxito en algunas faenas mineras y portuarias, disminuyendo el tiempo requerido para el proceso de capacitación (y, con esto, modificando la pendiente de las curvas de aprendizaje).
Por otro lado, no se puede dejar de mencionar los impactos que se van a generar a partir de los fenómenos meteorológicos, que se esperan debido al fenómeno del Niño, que se suma a las interrogantes que ya se han abierto hace un tiempo respecto del cambio climático; ambos con un particular impacto en la construcción en las zonas marítimas y costeras. Leer más