Existe una gran oportunidad para revitalizar tanto el sector de la construcción como el inmobiliario al simplificar el acceso al crédito, fomentar la inversión y promover la creación de empleo. No obstante, se anticipa que este efecto se manifestará de manera gradual debido a una serie de factores que inciden en el entorno financiero y económico en su conjunto.
El Banco Central anunció el martes pasado una rebaja de 75 puntos base en la tasa de interés, situándola en 6,5%, en consonancia con las recomendaciones del Grupo de Política Monetaria (GPM) del día anterior. Esta medida se tomó de manera unánime en el Consejo del ente emisor y responde a un escenario global donde la actividad económica muestra perspectivas moderadas, aunque con indicios de recuperación en algunos ámbitos.
La disminución de las tasas de interés tiene el potencial de reactivar el crédito y estimular la generación de empleo en diversos sectores, incluyendo la construcción e inmobiliaria. Esto se traduce en una reducción esperada en las cuotas de préstamos en los próximos meses, lo que beneficiaría a la economía en general.
La caída en la inflación y en el tipo de cambio son factores clave que han impulsado esta decisión del Banco Central. Se espera que la disminución en la Tasa de Política Monetaria (TPM) resulte en una oferta de tasas de interés más bajas por parte de los bancos públicos y privados. Se prevé que antes de que finalice el primer semestre del año, se implementen al menos dos reducciones adicionales en la TPM.
Es importante destacar que el índice de referencia ha disminuido significativamente, pasando del 9% en enero de 2023 al 5,25% en la actualidad. A pesar de esto, los beneficios para los deudores han sido limitados, especialmente tras un año 2022 marcado por una inflación del 13%, el dólar a $700 y precios históricamente altos de la gasolina.
La baja en las tasas de interés también contribuirá al impulso del empleo y la inversión privada, así como al aumento del consumo en la economía. Sin embargo, se espera que esta reducción se produzca de manera gradual, ya que los bancos han tenido que amortiguar el impacto de las decisiones del Banco Central, aumentando las tasas cobradas a los deudores durante el periodo de aumento de la TPM.
Además, existen otras razones que influyen en la velocidad de reducción de las tasas de interés, como el aumento del encaje mínimo legal y una serie de regulaciones que afectan los costos del proceso de captación y préstamo de recursos por parte de los bancos. Estos factores generan un rezago entre la tasa fijada por el Banco Central y la que efectivamente pagan los deudores, lo que puede prolongar los beneficios de la reducción de la TPM en el tiempo.
En resumen, la baja en las tasas de interés anunciada por el Banco Central tiene el potencial de dinamizar el sector de la construcción e inmobiliario al facilitar el acceso al crédito, estimular la inversión y generar empleo. Sin embargo, se espera que este impacto se materialice gradualmente debido a diversos factores que influyen en el sistema financiero y económico en general.