¿Cuáles son los principales objetivos de APRIMIN para inicios de 2025?
Antes de hablar de los objetivos específicos de APRIMIN, es importante mencionar la necesidad actual de la industria de aumentar la inversión y la productividad. Ambas son fundamentales para generar los recursos que permitirán, posteriormente, un mayor bienestar social, inversión en mejores tecnologías, mejoras en la oferta laboral de la industria minera, apoyo a las comunidades, entre otros aspectos. Sin embargo, para lograr esto se necesitan recursos, y tanto en inversión como en productividad, los proveedores y contratistas tenemos mucho que aportar.
En cuanto a la inversión, contribuimos con al menos el 70% de los empleos en minería. Por ello, creemos que nuestra voz debe ser escuchada en el desarrollo de políticas públicas. Entendemos que la industria minera es un ecosistema que abarca más tipos de empleos de los habituales conocidos en minería. También aportamos difundiendo y generando puestos de trabajo en regiones, educando sobre nuevas tecnologías y desarrollos que permitan una industria sostenible que integre a las comunidades. Este conocimiento, además, le otorga a la minería la "licencia social para operar".
Los proveedores también aportamos a la inversión mediante la generación de tecnología, la creación de plantas con procesos innovadores, la capacitación y la realización de estudios para identificar las competencias, oficios y profesiones que la industria necesitará en el futuro. Ofrecemos soluciones como amoníaco verde, hornos eléctricos, vehículos y maquinarias eléctricas o híbridas, entre otros ejemplos.
Cuando hablamos de productividad, es donde realmente vemos una gran oportunidad para los proveedores, ya que somos quienes generamos el conocimiento y la tecnología necesaria para abordar los desafíos relacionados con la productividad.
¿Y qué buscamos para nuestros socios? Entendemos que, teniendo esos dos objetivos macro como industria, a nuestros proveedores les preocupa que no se den las condiciones adecuadas en el país para mejorar la inversión y la productividad, lo que nos afecta directamente como empresas. Necesitamos que a las compañías mineras les vaya bien y que se generen más proyectos. Por ello, nos hemos propuesto tres objetivos clave para trabajar:
Creemos que, si nuestras acciones y planes se enfocan en brindar visibilidad, oportunidades, conexiones y apoyo a nuestros socios y clientes, así como en generar alianzas que permitan el desarrollo y trabajo conjunto, habremos hecho un buen trabajo. En la minería, nos debe ir bien a todos sin excepción, ya que somos interdependientes. Incluso cuando factores externos, como guerras u otras crisis, afectan la logística, nuestros clientes sufren las consecuencias. Asimismo, cuando el precio del cobre cae o se cancela un proyecto minero por razones no técnicas, los proveedores nos vemos gravemente afectados, y con ello, más de la mitad de las fuentes de empleo en la industria. Por eso, el trabajo hoy es con todos los actores, ya que nos necesitamos mutuamente.
¿Qué aportes ha realizado APRIMIN en 2024 y qué planea para el resto del año?
El 2024 fue un año de grandes cambios para nuestro gremio. En primer lugar, tuvimos una importante renovación en el directorio, con directores que no solo representan a empresas proveedoras de gran relevancia, sino que también cuentan con una destacada trayectoria profesional. Son personas comprometidas y activas a la hora de trabajar por el gremio.
Así fue como generamos los Círculos de Socios, la Mesa de la Mujer en APRIMIN, la Mesa de Emergencia, y firmamos convenios relacionados con la estandarización de los requisitos para solicitudes pre-ocupacionales e ingresos a faenas. Recientemente, hemos trabajado en distintas instancias para reducir los tiempos de tramitación de las Jornadas Excepcionales de Turno. Gracias al trabajo conjunto en la mesa tripartita, en la que participamos junto a los trabajadores y el gobierno —y, especialmente, gracias al esfuerzo del Ministro de Economía Nicolás Grau y del Subsecretario del Trabajo Giorgio Boccardo— se logró el lanzamiento del Aplicativo de Sistemas Excepcionales de Distribución de Jornada de Trabajo y Descansos. Esto permitirá reducir los tiempos de aprobación de las jornadas excepcionales de 45 a 30 días. Si logramos que las compañías mineras se adhirieron a la Jornada Marco, este plazo podría reducirse aún más.
Aún así, nuestros objetivos son de largo plazo. El mayor desafío actual es cambiar la percepción que la sociedad tiene de la minería, generando la licencia social para operar que la industria necesita. Somos parte de un ecosistema comprometido en hacer de la minería una industria sostenible. De hecho, la minería es clave para la transición energética, ayudando a mitigar el cambio climático y beneficiando a todo el planeta y sus habitantes.