Si sabemos que la digitalización tiene múltiples beneficios para las empresas, y posiblemente quienes no avancen en esta materia no permanecerán en el tiempo, ¿por qué la construcción no ha avanzado al mismo ritmo que otras industrias?
Si declaramos que prevenir accidentes es una prioridad, incluso un valor empresarial, ¿por qué no se invierte más en prevención de riesgos?
Posiblemente muchos han tenido o conocido malas experiencias en proyectos de digitalización, y por eso evitan o demoran invertir en tecnologías. Por esto, en esta ocasión quisiera explorar las barreras que pueden aparecer en un proceso de digitalización de la prevención de riegos, y la mejor manera de abordar estas dificultades.
La digitalización de la prevención de riesgos no debe considerarse como un proyecto con un inicio y fin definidos, sino que debe ser entendida como una forma de trabajo en constante evolución. Esto implica la implementación de mejoras incrementales, la adaptación a nuevos procesos o cambios en los existentes y el compromiso continuo con el desarrollo de las personas.
Es clave encontrar el equilibrio adecuado entre las personas, los procesos y la tecnología. No se trata simplemente de implementar nuevas herramientas digitales, sino de asegurarse de que estas se integren de manera efectiva en los procesos existentes y que las personas estén capacitadas y comprometidas en su uso.
En resumen, la digitalización de la prevención de riesgos en empresas constructoras es un proceso desafiante pero necesario. Al adoptar un enfoque equilibrado entre personas, procesos y tecnología, abordando las dificultades de manera proactiva con las soluciones adecuadas, se puede avanzar hacia un entorno de trabajo más seguro y eficiente, con beneficios a largo plazo para la organización y sus trabajadores.
Con todo lo anterior, me vuelvo a preguntar, ¿por qué aún muchas empresas no toman la decisión de avanzar en la digitalización de sus procesos de prevención? Leer más