LA INDUSTRIALIZACIÓN ELEVA LA SOSTENIBILIDAD y productividad de obras de infraestructura
América Latina tiene el potencial de atraer inversiones en infraestructura, en conectividad y para el combate del cambio climático.
Según informaciones del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), la región puede proveer soluciones para enfrentar, por ejemplo, la inseguridad alimentaria y las emisiones de gases de efecto invernadero, al suministrar al mundo alimentos nutritivos y de calidad, y además, fomentar la producción de energía renovable.
La actuación del BID en América Latina y en el Caribe es fundamental al invertir en áreas estratégicas como infraestructura, turismo, salud, entre otras. Son alrededor 600 proyectos que están funcionando con financiamiento del Banco, que realizó aportes de US $23,4 mil millones en 2021.
La entrada de inversiones extranjeras en la región es de extrema importancia, pues América Latina y el Caribe necesitan aumentar su productividad, cubrir de manera más robusta las necesidades básicas como infraestructura de desplazamiento, salud, educación, ampliar la conectividad en las áreas urbanas y rurales, fortalecer las ciudades estratégicas de manera más sostenible, mejorar la movilidad urbana en pro de la sostenibilidad, interconectar y transportar su producción de forma más competitiva.
Según el BID, para Brasil, específicamente, serán necesarios US$ 110 mil millones al año hasta 2040 para llenar la laguna de inversiones en infraestructura en este país, y las principales oportunidades están en asociaciones público-privadas (PPP en portugués) y nuevos instrumentos financieros para atraer inversiones del mercado de capitales.
Ante dicho escenario, y para acelerar la construcción de la infraestructura necesaria en América Latina de manera sostenible, la industrialización es una gran aliada. Por ejemplo, la prefabricación en hormigón, une productividad, calidad, eficiencia y sostenibilidad de la producción industrial con el uso de modernas tecnologías, y la posibilidad de integración de los proyectos estructurales y arquitectónicos a través del Building Information Modeling (BIM).
Premio a los prefabricados
El Galardón Obra del Año en Prefabricado de Hormigón, principal premiación del sector en Brasil, elige los principales proyectos en tres categorías: Edificaciones, infraestructura y pequeñas obras, que muestran el estado del arte en el sector.
En 2022, la vencedora en el área de infraestructura fue Obras de Artes Especiales de duplicación de una autopista en el Estado de São Paulo, la Raposo Tavares. Fueron usadas fundaciones y superestructuras en elementos estructurales pretensados. Como resultado, hubo una mejoría para el usuario de la autopista, y mejoró el desplazamiento de las materias primas y productos de la región. La aplicación del sistema constructivo permitió la reducción de plazos, mitigación de los aspectos ambientales y generó una mayor viabilidad de costos.
En el área portuaria, fue premiada la expansión del terminal de líquidos del Catallini en el Puerto de Paranaguá, en Paraná, que es el terminal más grande de líquidos de Brasil. Los trabajos realizados en áreas portuarias y ambientes marítimos requieren siempre cuidados especiales debido a la agresividad del ambiente. Por eso, fue desarrollado un hormigón especial para la fabricación y desplazamiento de las vigas y de los acabados superiores, con las siguientes características: Fck ≥ 40 MPa (28 días) y Fck ≥ 25 MPa (para desforma); y consumo mínimo de cemento 400 kg/m³. El hormigón también necesitó una gran fluidez, pues la sección de lanzamiento era de solamente 15 cm y la pieza tenía una alta tasa de armadura. Así, fue desarrollado un trazo con flow de 800 mm.
El Aeropuerto Internacional de Brasília - Presidente Juscelino Kubitschek - recibió una ampliación del 83,3% de área, aumentando de 60 mil m² a 110 mil m². Para cumplir con los plazos, fue necesario montar una fábrica de prefabricados de hormigón con cuatro pistas de pretensado, con capacidad de 200 toneladas, una cuna para producción de pilares circulares, una para pilares de muchas facetas y un área para recibimiento y distribución de hormigón fluido. Sumado a eso, había más 3.000 m² de espacio para almacenaje de pilares, vigas pretensadas, losas alveolares, además de tres pórticos con capacidad para 20 toneladas, y 40 metros de vanos.
Dichos casos de éxito muestran que el prefabricado de hormigón está preparado para cumplir con las obras de infraestructura necesarias en América Latina, para fomentar el desarrollo socioeconómico regional, una mejor calidad de vida y reducir el impacto ambiental de la construcción. Leer más