Liderazgo Inspirador: De la Teoría a la Práctica en las Empresas Modernas

Juega un rol clave. Hoy en día se habla mucho de liderazgo y sus efectos positivos o negativos en una organización, también se habla de diferentes estilos basándose en las necesidades y tendencias de las nuevas generaciones. Sin embargo, increíblemente, este concepto data de 1978, cuando James MaGregor Burns popularizó la teoría en su libro "Leadership". Él apuntó a la importancia de tener la capacidad de guiar e influir positivamente en el crecimiento de otros a través del ejemplo y la inteligencia emocional, logrando así una transformación profunda en las organizaciones con equipos inspirados y motivados.

En este sentido, se basó en la idea de que los líderes no solo supervisan, sino que inspiran a sus equipos, fomentando un entorno en el que los empleados puedan desarrollar todo su potencial, llevándolos a mejorar su desempeño, habilidades y conocimientos.

¿Qué rol juega la inteligencia emocional en la construcción de confianza dentro de un equipo?

La inteligencia emocional es hoy una habilidad diferenciadora en una marca personal, ya que ayuda a desenvolverse no solo en el ámbito profesional. El rol que juega en tu forma de afrontar todas las situaciones y, por efecto, en tu actitud es brutal. Muchos dicen que ser inteligente emocionalmente es controlarse, pero va mucho más allá de eso. Es gestionarte a ti mismo y gestionar las emociones de tu entorno. Si lo llevamos a un equipo de trabajo, mejorarás la comunicación, colaboración y eficiencia. Hay actividades de equipo que aportan en este aspecto, pero lo realmente potente es que el líder tenga ese sello en el día a día.

¿Por qué es clave que los líderes sepan valorar cuando alguien reconoce un error?

Lo clave es que podríamos estar perdiendo un talento por interpretar a la inversa esta señal de confianza. Cuando alguien reconoce un error, si damos vuelta el foco, esta persona tiene la capacidad de aprender. El error entrega retroalimentación, autoconocimiento, la oportunidad de comprender algo de mejor forma y de ser maestros de quienes no lo han cometido aún. Y si vamos al otro nivel, ese acto de reconocer es un signo de vulnerabilidad que se aplica solo si hay confianza. Nuestra forma de afrontarlo determinará si esa confianza se mantiene o no. Les recomiendo leer a Patrick Lencioni, quien define las 5 disfunciones de un equipo en orden piramidal, siendo la base la falta de confianza.

¿Cómo podemos transformar los errores en oportunidades de aprendizaje colectivo?

Los errores son la parte de mayor riqueza para una empresa. Todo dependerá de como lo gestionemos, la innovación por ejemplo tan en boga hoy en día requiere de espacios para errar; el resultado puede ser que sirva o no pero ambos son un resultado, en el que se dejará el antecedente y se ajustará el procedimiento para el futuro. Si ya tenemos un espacio seguro y de confianza, solo se debe analizar la situación, realizar una retroalimentación constructiva y luego llevar idealmente la reflexión al resto del equipo, área o compañía dependiendo de la temática, de esa forma capitalizar el aprendizaje.

En el rubro constructor ha habido un avance significativo en la preocupación por el clima interno, las empresas están midiendo y desarrollando este concepto, con lo cual se han generado referentes que aportan transversalmente desde las obras hasta la administración y directivos. Esto ocurre cuando logramos comprender que el clima no es solo un tema del área de recursos humanos, sino de todos.