Construcción progresiva de calidad: el caso de Guardián Constructor
La construcción progresiva es el método predominante en Latinoamérica y El Caribe, pero presenta desafíos para las familias de bajos ingresos. Estas enfrentan barreras financieras y técnicas, lo que lleva a construcciones extendidas a lo largo de 16 años, con sobrecostos que duplican el valor estimado real para una vivienda (GRADE, 2024). Por otro lado, las familias priorizan el precio sobre la calidad, influenciadas por la falta de información y opciones financieras adecuadas. Además, las pequeñas empresas constructoras no cuentan con incentivos para ofrecer servicios formales adaptados a este segmento, perpetuando la baja calidad de las viviendas y la inseguridad estructural. Sumado a esto, muchas de estas viviendas se encuentran en zonas de alto riesgo sísmico, lo que agrava la vulnerabilidad de las familias.
Es en este contexto que surge Guardián Constructor, una iniciativa que busca ofrecer soluciones integrales a las familias que desean construir o mejorar sus viviendas de forma progresiva, pero con calidad. Este modelo de negocio articula a diferentes actores del ecosistema de la construcción para garantizar que las familias accedan a servicios de calidad, desde el diseño, la construcción final y el financiamiento. La iniciativa, liderada por el Centro Terwilliger de Innovación en Vivienda, en colaboración con empresas de construcción y financieras, busca reducir la fragmentación del mercado de la vivienda progresiva.
Entonces, desde la realidad peruana en específico, ¿cómo aborda el problema Guardián Constructor? Es concreto, es una iniciativa que busca ofrecer soluciones integrales para las familias que desean construir o mejorar sus viviendas de forma progresiva, pero con calidad.
Uno de los principales problemas en la construcción progresiva de vivienda es la falta de continuidad en el proceso. Muchas familias contratan a diferentes maestros de obra en cada etapa de la construcción, lo que genera inconsistencias y problemas estructurales. A esto se suma la falta de planificación y la compra de materiales en pequeñas cantidades, lo que encarece el proceso. Guardián Constructor propone un servicio integral que inicia con el expediente técnico y termina con la vivienda construida, pero también es consciente de la dinámica económica de la familia, por lo que modula su servicio en paquetes de construcción y mejoramiento sin perder calidad y eficiencia.
El modelo de Guardián Constructor también juega un papel crucial en la formalización del sector de la construcción. Al articular a pequeñas y medianas empresas, ferreterías, arquitectos y maestros de obra, Guardián Constructor crea una red que no solo mejora la calidad de las viviendas, sino que también genera oportunidades de empleo y fomenta la capacitación técnica en el sector de cara a mejoras prácticas constructivas. Este enfoque integral permite que las familias confíen en los servicios que contratan, sabiendo que están trabajando con empresas formales y profesionales capacitados.
Finalmente, cuando la familia decide construir o mejorar su vivienda, requiere alternativas de financiamiento, escenario que también ha contemplado Guardián Constructor, acompañándolos y articulándolos con instituciones microfinancieras.
Sin embargo, el camino hacia una construcción progresiva de calidad aún enfrenta retos. Es fundamental seguir trabajando en la creación de políticas públicas que apoyen este tipo de iniciativas y que faciliten el acceso al financiamiento para las familias más vulnerables. Guardián Constructor ha demostrado que es posible articular a diferentes actores del mercado para ofrecer soluciones integrales, pero para escalar este modelo es necesario el apoyo del sector público y privado.
Desde su creación en el 2020, Guardián Constructor ha brindado servicios a más de 4000 familias. Además, el programa ha logrado articular a más de 30 socios, entre instituciones financieras, empresas de construcción y proveedores de materiales, contribuyendo en la generación de un ecosistema sólido y sostenible para la construcción progresiva de vivienda en el Perú.
¿Qué sigue? Creemos que existen oportunidades de expandir esfuerzos en la región LAC para desarrollar modelos innovadores de servicios de construcción llave en mano más flexibles y accesibles para atender a este segmento. ¿Quién se anima?
