Cuando la ley no se cumple, intuimos quienes son las víctimas, pero… ¿Quiénes son responsables?
Estamos cerca de iniciar una nueva temporada de incendios forestales, vemos con asombro, pero sin capacidad individual de hacer algo cuando en Brasil se queman extensas superficies de lo que todos consideramos patrimonio de la humanidad como El Pantanal, que pasará a ser una pérdida más de la biodiversidad mundial.
En Chile, muchos investigadores (entre los que me sumo), políticos y autoridades sabemos y compartimos la preocupación por los recursos naturales. Nos tranquiliza saber que Conaf cuenta con más capacidades para combatir los incendios, tanto en recursos humanos como material, pero todo eso se activa cuando los incendios están en desarrollo y antes sólo se ha trabajado a través de la divulgación de acciones preventivas en las comunidades respecto de evitar encender fuego y denunciar actos como ese.
Si se profundiza, la situación de vulnerabilidad del hábitat en Chile es cada vez más alarmante, en zonas rurales se ven casas dispersas en las laderas de los cerros, en bordes de río, sin urbanización, claramente en altos niveles de riesgo producto de las amenazas del entorno, sumado al aumento de campamentos, asociados a la crisis migratoria y al déficit habitacional, la situación es muy compleja. Entonces, al llegar la temporada de incendios forestales, hay graves riesgos de catástrofes en Chile, población en peligro, infraestructura no preparada, y grave exposición al peligro de continuar perdiendo el patrimonio en recursos naturales y plantaciones en el país.
Las siguientes son preguntas que para muchos no tienen respuesta, aunque para mí, en la mayoría enrostran el por qué cuesta tanto mejorar la gestión. ¿Qué medidas se toman?,¿que señalan las leyes en Chile de cómo debemos habitar el territorio, ¿en qué nos ayudará la nueva Ley de incendios forestales?, ¿la Ordenanza General de Urbanismo y Construcción establece mecanismos específicos para habitar en zonas de alto riesgo?, ¿cuánto están pudiendo hacer los municipios?, ¿cuentan o no con planes maestros contra incendios forestales, planes reguladores u ordenanzas comunales? Y si los tienen, ¿los pueden hacer valer?
Lo que se observa al final de cada temporada es que los equipos y brigadas se centraron en proteger la vida de las personas y su infraestructura, dejando en tercer lugar la protección de los bosques, sin cuestionar el si esas personas debían o podían estar donde estaban, y si ellas habían tomado medidas para evitar la propagación del fuego. ¿Se hace frente a la fiscalización de viviendas mal construidas?, dónde la madera suele ser usada como material ligero y hacemos ampliaciones precarias, incumpliendo la OGUC independiente de la materialidad y sin supervisión de expertos, viviendas donde adosamos techos plásticos altamente combustibles, o acumulamos basura, leña y pastizales. Peor aún, permitiendo el funcionamiento de actividades que aumentan el riesgo como bombas de bencina, fábricas de plástico en zonas que ya están registradas como de alta probabilidad de ocurrencia de incendios forestales o donde está en riesgo la infraestructura crítica que precisamente se requiere para atender las emergencias. Lo anterior, pone en peligro no sólo los bienes de las personas, sino también los recursos naturales y productivos.
Debemos poner más énfasis en la causalidad, y este mes de noviembre, me gustaría estar escuchando una campaña más dura y profunda que ponga orden en todo esto y no sólo a Forestin pidiendo que no prendan fogatas. Que si hay que sancionar y aumentar las sanciones que así sea, o que si hay que apoyar de forma preventiva a quienes no pueden tomar acciones preventivas, como la limpieza de quebradas que esta sea ejecutada por quienes tienen responsabilidad y si estos no lo asumen, exista la fiscalización y sanción públicamente conocida, creo que Conaf trabaja duro en educación ambiental, pero mi impresión es que eso es insuficiente y podemos hacer más, haciendo que el gobierno a través de los ministerios, como el de la vivienda y urbanismo, Senapred y los municipios tomen cartas en este asunto. Leer más