¿Necesitamos un “circular washing” también en Economía circular?
Ya llevamos dos sesiones en el comité del Proyecto de Norma en consulta pública NCh 3835 “Economía circular - Atributos de circularidad e indicadores de circularidad – Vocabulario y marco de referencia para atributos e indicadores de circularidad en entornos construidos” y el ánimo de aportar lo describo en los tres temas siguientes:
- Propuse una reflexión inicial de cómo abordar la norma haciendo las siguientes preguntas:
- ¿Qué queremos con esta norma?
- ¿A quién beneficia y aporta esta norma?
- ¿Cómo queremos que se use?
- ¿Cómo cada uno de los asistentes al comité vive, usa y trabaja con estos conceptos? (Su lenguaje, relacionamiento con el medio técnico y negocios, etc.)
Y dos comentarios para incluir en la norma:
- Incluir claramente que el resultado no es residuo sino, sigue siendo material o producto que puede ser usado en etapa de diseño considerado como parte de un círculo virtuoso. Esto pensando en diseñar una estructura que puede ser parcial o totalmente reutilizada al término de la vida útil, conforme se realice un diseño adecuado y compatible en etapa temprana. Esto es posible con uso de prefabricados y un método constructivo industrializado, como lo que demostré con ejemplos reales.
- En la etapa de diseño establecer que si es posible indicar la cantidad de residuos a generar, ya que sabemos el tipo material y su configuración de uso y el método constructivo, por lo tanto, colocar un indicador y parámetro de cantidad y valorización de residuos en el diseño dejaría en evidencia lo bien o mal que estamos haciendo en etapa temprana, al evaluar diversos materiales, métodos constructivos y oportunidades de reutilización. Con esto agregamos valor a la etapa de diseño, evaluación e ingeniería basados en la estrategia de construcción, uso, mantenimiento y reutilización de la estructura.
De igual manera con el greenwashing, tenemos el desafío de establecer un base conceptual para que todos estos conceptos sean implementados de manera correcta en las organizaciones, empresas y mercado.
Esto, porque en Chile y el mundo está insertándose la demagogia en la industria construcción ya que continuamente estamos abordando el problema, es decir, el resultado, mientras que no estamos deteniéndonos y revisando en la etapa de diseño la oportunidad de generar menos o cero residuos. Ustedes dirán, ¿pero cómo? Si todos hablamos de reducir los residuos o gestionar su generación, lo cual es cierto, pero en la práctica, en la etapa de diseño se está haciendo poco o nada.
Cuando en plena reunión del comité señalo que si es posible diseñar y construir una vivienda 100% prefabricada desde las fundaciones, y que actividades complementarias también se pueden industrializar, a los principales expertos en gestión de residuos y economía circular les llama la atención y se sorprenden. ¿Entonces, sabe todo el mercado acerca de la oportunidad de diseñar con una base de cero residuos?
La creación de estos comités técnicos tiene varios desafíos, cómo conectar el trabajo que realizan profesionales de la etapa de anteproyecto con la realidad de la industria, lograr integrar las diferentes miradas, conceptos y alienar con la idiosincrasia técnica de Chile, aclarando dudas y conceptos.
Por ejemplo, el desafío de incluir una introducción adecuada que actualmente tenemos en revisión, y que en su primer párrafo dice lo siguiente: “el concepto de economía circular abarca una amplia gama de temas, desde el ciclo de vida completo de los productos hasta los modelos de negocios. El concepto general de una economía circular implica diferenciar y cerrar los bucles entre los diferentes ciclos de vida de un flujo productivo y de uso, mediante la aplicación de diseños, servicios y procesos que permitan optimizar el desempeño ambiental de los productos y servicios en uso, …”.
¿Qué opinas ahora de la economía circular? Leer más